Las pérgolas son una solución arquitectónica que contribuye a la mejora de los espacios al aire libre para ampliar el tiempo de aprovechamiento de los mismos sin depender de las condiciones climáticas. Están compuestas por una estructura y una cubierta que cumplen con una funcionalidad mientras mantienen el atractivo visual de la edificación.
Además, a las pérgolas fijas jardín se les puede añadir un cerramiento con toldos verticales en cada lateral del espacio, por lo que otorgan la posibilidad de llevar a cabo un cierre perimetral del recinto para lograr una protección total. Por tanto, se trata de un producto ideal para cubrir la terraza tanto de una vivienda como de un negocio.
Clases de pérgolas
Las pérgolas adosadas favorecen la creación de espacios que se convierten en una extensión del inmueble, puesto que cuentan con dos mástiles y se apoyan en una pared. Así, estos espacios se encuentran anexos a la estructura y se integran como parte del conjunto arquitectónico.
Por otro lado, las pérgolas independientes cuentan con cuatro puntos de apoyo, por lo que pueden colocarse en cualquier lugar y mantenerse en pie por sí misma sin necesidad de tener ningún punto de apoyo.
Las pérgolas instaladas entre paredes no constan de ningún mástil, sino que sus largueros se anclan a dos paredes paralelas. De esta manera, se crean espacios cubiertos y libres de obstáculos.
Pérgola tipos: madera
Son estructuras clásicas hechas con columnas de madera sobre las que reposa una estructura de vigas de madera con el fin de proteger el espacio.
La estructura de este tipo de pérgolas se suele decorar con plantas trepadoras, aprovechando la sombra que aporta el follaje de las plantas. No obstante, la madera es un material natural que requiere un mantenimiento regular para evitar su deterioro.
Pérgola tipos: aluminio
Son una estructura de aluminio con techo de lona que sirve para cubrir un espacio del sol y la lluvia. Ambas partes de la pérgola requieren un mantenimiento muy sencillo.
La principal característica de este tipo de pérgolas es que cuenta con el aluminio como material de construcción, el cual destaca por ser ligero, resistente y duradero.
Pérgola tipos: bioclimáticas
Es el modelo de pérgolas fijas jardín más completo del mercado, puesto que están hechas con materiales de alta calidad y la última tecnología para adaptarse a todo tipo de espacios y edificaciones.
Estas pérgolas bioclimáticas están fabricadas en aluminio de forma íntegra e incorporan un diseño bioclimático con las prestaciones más modernas para proporcionar un mayor confort en los espacios y un sistema de desagüe que impide la acumulación de agua en el techo, lo cual evita la sobrecarga de la cubierta.
Su característica principal es el techo compuesto de lamas de aluminio, las cuales se gradúan entre los 0 y los 90 grados para permitir una regulación precisa de la luz y la ventilación, lo que permite moderar la temperatura del espacio y evitar el efecto invernadero. También pueden cerrarse de forma hermética para impedir la entrada de lluvia, nieve o granizo. Las lamas se accionan a través de un mecanismo eléctrico que se activa con un mando a distancia, un cuadro de mandos o una aplicación móvil.
Diferentes tipos de pérgolas
Los diferentes tipos de pérgolas poseen un diseño que desarrolla una funcionalidad esencial para que las personas disfruten de los espacios al aire libre sin que las inclemencias del tiempo supongan un obstáculo para ello. Las características de cada modelo ofrecen distintas ventajas, por lo que el usuario deberá elegir entre un tipo de pérgola u otro en función de sus necesidades. En cualquier caso, todas las pérgolas contribuyen a optimizar los espacios exteriores de la vivienda o del establecimiento además de revalorizar el inmueble.